miércoles, 13 de abril de 2011

El papá de Leiva (Cuentos de la era del 1 a 1)


No me gustaba pasar por los edificios de Catónas. Tenía pasaporte porque conozco a Toti y había conocido a Osvaldo y en la pared de la entrada a la perlita y en un paredón de Mariló y en uno de Catónas está escrito:
Osvaldo vive.
Pero me jodía pasar por el alambrado. Cuando bajaba del colectivo lo tenía que cruzar de punta a punta y no había vez que no estuviese el papá de Leiva. Siempre en pedo.
- puto- me decía- putito, hincha de all boys; puto de villa crespo.
(Yo no conocía villa Crespo, ni había ido nunca a capital)
Al principio pensaba que tenía algo conmigo, que le podían molestar mis remeras un poco ajustadas. Mis músculos. Pero después me enteré de que hacía eso con todos los amigos del hijo.
El padre de Leiva tenía un hermano menor que a veces lo acompañaba. Ese me decía judío, rabino. Yo lo tomaba como de quien venía, de un borracho que siempre estaba al otro lado de un alambrado.
Nunca me crucé al papá de Leiva fresco, pero dicen que cuando lo estaba era un buen tipo.
En una pared del edificio de Shuto lo habían dibujado al papá de Leiva:
Un monigote con una botella en la mano, le habían puesto una burbuja de historieta:
“yo no puedo tomar, hace un año que no tomo. HIP"
El padre de Leiva siempre estaba con eso de que no tomaba por la presión. No le creía nadie. Lo de la presión era una excusa para no trabajar. Se jubiló a los cuatro años.
Hasta que un día plaf, el pico.
Estuvo un tiempo en el hospital de los leprosos en Rodríguez.
Reapareció.
Los primeros tiempos no puteaba a nadie. Siempre en su silla al otro lado del alambrado, pero calladito. Podía pasar la más linda del barrio en pollera que el tipo ni mu.
Pero apenas se recuperó empezó de nuevo.
A mí me grita: Willie Tanner, Sergio Tachini y moishe o ravinovich. A shuto le dice Mickey Mouse o fiambre.
Está hemipléjico, por eso nadie salta el alambrado y le arruina la cara.

2 comentarios:

  1. Triste historia, trágico final para aquel que llena su vida en la burla y el menosprecio hacia los demás. Así es la vida.

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  2. Ah, es una lectura que no tenía en cuenta. Buen aporte, Corazón Enamorado.
    un saludo.

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